Cada guitarra es única, pues no existen dos árboles iguales, cada uno es único en sus especie, y aunque sea de la misma familia el árbol, el clima, las enfermedades, la edad, incluyendo el proceso de serrado y secado determinarán el sonido de cada guitarra.
El corte de las maderas también es un proceso importante, pues en él se definirá la dirección de las vetas, así como el dibujo que posteriormente se verá reflejado en la guitarra. Se supone que las vetas tienen que ser rectas, paralelas y sin nudos. Ésto en el caso de la tapa armónica. En el caso de los fondos y los aros nos encontramos con lo opuesto en muchas ocasiones.
Las guitarras caras suelen lucir dibujos irregulares y bellos, pero esto no es mas que cuestión de estética, pues no afecta al sonido de la misma.
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